La Parroquia de Santa Marina de Cañaveral hace balance de su acción pastoral y económica entre 2022 y 2025, un periodo marcado por la implicación de toda la comunidad y por un signo constante de fraternidad y generosidad.
Durante estos años, la parroquia se ha volcado en las campañas solidarias diocesanas, nacionales e internacionales, así como en las necesidades más cercanas. Cáritas parroquial ha estado siempre presente para socorrer a las familias en momentos de dificultad, garantizando que nadie quedara desatendido en el pueblo. Esta acción callada y eficaz ha sido posible gracias a la colaboración de cada feligrés, que con su granito de arena ha hecho visible el rostro de una Iglesia comprometida. Las actividades del año 2024 supusieron un gasto de 8710, 34 € que restado a los 9194,50 € nos da un superavit de 484,16 €.
La vida de la comunidad ha estado jalonada de peregrinaciones, viajes, celebraciones tradicionales, conciertos y actuaciones, en los que los cañaveraliegos y cañaveraliegas han participado con entusiasmo. Cada actividad ha sido un espacio de fe compartida y de encuentro comunitario, consolidando la identidad cristiana de Cañaveral y fortaleciendo el sentimiento de pertenencia a la parroquia.
La parroquia ha sabido cuidar también de sus bienes inmuebles, símbolo de fe y patrimonio de todo el pueblo. Entre las principales intervenciones realizadas destacan:
Cada una de estas actuaciones ha sido posible gracias a la colaboración de los vecinos, que han aportado con generosidad sus recursos y su trabajo.
La gestión económica de la parroquia se presenta saneada y sin deudas. A fecha del 15 de septiembre de 2025, los saldos son los siguientes:
A esto se suma la gestión de fondos específicos:
La parroquia ha subrayado que todo lo conseguido ha sido posible gracias a la confianza y a la generosidad de los cañaveraliegos y cañaveraliegas, que han hecho de la corresponsabilidad una realidad palpable. Cada familia ha contribuido en la medida de sus posibilidades, y el resultado es una comunidad fuerte, sin deudas y con proyectos de futuro.
“Damos gracias a Dios por la fraternidad comprometida de este pueblo”, expresan desde la parroquia, que también ha querido tener un reconocimiento especial a Cáritas parroquial por su incansable servicio.
Cañaveral puede sentirse orgulloso de su comunidad cristiana, capaz de unir fe, tradición, acción social y buena gestión en un mismo proyecto común.